Remembranzas y Embarnecimiento
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Posted:Jan 31, 2010 8:54 am
Last Updated:Sep 13, 2010 4:25 am 13657 Views
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Al caminar por la ciudad, veo a lo lejos una niña de unos once años que cruza velozmente de calle, en seguida pasa persiguiéndola un escuincle de su misma edad que llevaba consigo un globo relleno de líquido; al calcular el infante que ni volando iba a poder acortar mas distancia entre él y su presa, se anima a lanzar el objeto que traía en sus manos rompiéndose el frágil proyectil al momento del contacto con la humanidad de la chiquilla. Esta se detiene muy enojada, gira la cabeza y le grita al chico: “aviéntame un hermano”.
Me dije, Shaales, como ha cambiado esta juventú…se me hizo rara esa expresión en labios de una mujercita. Recuerdo que esos jueguitos de lanzarse bolitas de papel en las aulas entre los muchachitos nadamás por poner gorro, era habitual y siempre se respondía con el clásico “mejor aviéntame una hermana”. En fin, las costumbres cambian, y más ahora con eso de la equidad de género, la liberación femenina y no sé que más cosas, también tienen derecho las féminas a que se les aviente a su complemento humano, pero no a esa edad, sino cuando ya estén grandecitas y pues, mientras sean simples palabras y un juego, tal como promesa de político, todo está bien.
Sigo mi andar sin detenerme a esperar en que terminaba ese juego de niños. Al llegar a casa, veo entre los tantos noticieros que hay en la tele, que la mayoría aborda una noticia en especial: más de el 70 por ciento de los mexicanos adultos estamos pasados de lonja. Recuerdo que en mis tiempos mozos, la mayoría de mis familiares de edad, cuando veían a un bebé rellenito expresaban que el nene en cuestión estaba “muy sanote” también llega a mi memoria que en mi adolescencia, en una etapa en que empecé a entrar en carnes decían “es que ya estás agarrando cuerpo de hombre, ya estás empezando a embarnecer”, pero neee, cual embarnecer, será engordecer, y pues cuerpo de hombre, siempre había tenido, que yo recuerde, nunca me había hecho la operación jarocha, lo que pasa es que la familia es benévola y procuran no hacernos sentir mal evitando decir francamente que ya está uno muy panzón…pero ahora, con esas catastróficas noticias comprendo que más no es mejor, bueno, en cuestión de peso, porque en cuestión de pesos si…¿Y que es eso de “estar embarneciendo”?...suena como a estar agarrando la forma de Barney, el dinosaurio morado, ¿no?....
Ennnn fin, a ver si trato de bajarle un poco a los chescos amargosos y las botanas para no verme tan “embarnecido”. Mejor no pienso más en eso, porque al parecer en este día me dio por tener sólo recuerdos de mis tiempos idos, y como dicen, cuando se empieza a rememorar o a añorar como eran las cosas en otras épocas, es porque ya se siente el paso de los años.
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Al fin es viernes!!!
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Posted:Aug 16, 2008 5:11 am
Last Updated:Jul 5, 2009 2:07 pm 14307 Views
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las diez de la mañana (plena madrugada para mi) Me separo de las sábanas, mi almohada y mi osito de peluche con algo menos de resistencia que cuando es lunes. Aun extremadamente amodorrado hago el sobrehumano sacrificio de bajar los pies de la camita…y después de dos intentos fallidos logro que mis plantas se posen en el suelo para en seguida sentarme al filo del colchón y hacer el extenuante ejercicio matinal consistente en levantamiento de párpados. Fracciones de segundo mas tarde…!se hizo la luz!, un nuevo día florece ante mi, y para colmo de la dicha…!Es viernes!
Lentamente me incorporo y dirijo mis pasos hacia la cocina para prepararme la habitual taza de café, esa que hace milagros y me quita los ojos tipo oriental que se carga uno cuando aun se está más en el paraíso de los sueños que en el mundo real.Ya apoltronado en una silla del comedor comienzo a pensar en “la inmortalidad del cangrejo”, aunque no se de donde venga esa frase, yo me pongo a pensar en la perenne permanencia terrenal de ese mentado crustáceo.
Tiempo después mi máquina empieza a carburar. Miro de reojo hacia la puerta y me doy cuenta que por debajo de ella fueron deslizados varios sobres y papeles.
Desde lejos puedo adivinar que es el recibo de luz por el característico color “verde coraje”. Me encamino hacia donde está el puñado de documentos y al recogerlos veo que también Carlos Slim ya mandó cobrar su factura mensual. Mhhh…me digo a mi mismo: “este viernes está empezando mal”, pero bueno, ni modo, si quieres seguir en la red hay que pagar”.
Observo el monto del recibo de luz y doy gracias a papi gobierno por ser tan “bondadoso”. Porque según consta en el “cálculo del importe de su facturación”, la aportación gubernamental para el pago de la energía es de $445.00, es decir, ¡!me están subsidiando el 80% del gasto!!! “Wooow…este si es gobierno”, vuelvo a hablar conmigo mismo (algo que se me está haciendo costumbre)
La facturación de Telmex nunca varía…así que ya tengo previsto ese desembolso..
Después del trago amargo que pasé por los dichosos recibitos me encuentro con el flayer de un circo que se va a instalar el día de mañana. La publicidad tiene un resalte que dice “al mostrar este volante menor de 10 años gratis”…y me quedo pensando: “si consiguiera otro papelito de estos ¿me darían gratis a una de 20 años en lugar de dos menores de 10?.mmmhhh..no creo….lo que están ofertando menores de 10…se me hace que se les acabaron los “gorritos” a los cirqueros y ya no saben que hacer con tanto escuincle; por eso los están regalando”.
Durante mis divagaciones algo repentinamente me llamó la atención: entre la bola de documentos se encontraba un sobrecito blanco; no parecía de esos donde vienen las tarjetas de crédito que “obsequian” los bancos, tampoco tenía remitente, y que yo recuerde no tengo admiradoras secretas.
“¿Qué será?”, ¿lo abro, no lo abro?”. Dentro de mi paroxismo crónico pensé que era ántrax, pero pues ya pasó mucho tiempo desde el ataque a las Torres Gemelas y el terrorismo anda algo fuera de moda y a parte no creo que Bin Laden sepa que existo. Deseché esa idea.
Me armé de valor y abrí el susodicho envoltorio. En su interior había una hojita doblada en tercios (doblada en tres tercios, para ser más exaito  ). Al extenderla observé en el extremo superior derecho la imagen de “la madre de todos los mexicanos”, asease a la Virgencita de Guadalupe. La cartita traía un texto escrito a máquina, era una fotocopia. Comencé a leerla y resultó ser un eslabón de las llamadas “cadenas”, como las que circulan en los e-mails.
En ella se narraba lo que les había sucedido a las personas que cortaron la cadena, unos habían muerto atropellados, otros perdieron sus bienes o a su familia, en fin, puros sucesos trágicos.En contraparte estaban los que habían seguido la cadenita. Según el texto, a estos les había ido de perlas, se habían curado de enfermedades, habían ganado la lotería (no dice si compraron o no boleto), etc.Y por enésima vez comencé a hablar conmigo mismo y me dije: “estos de las cartitas han de tener muy buena organización, siguen paso a paso la vida de cada individuo a quien mandan sus escritos y se cercioran de quien cumple lo que les piden y quienes los tiran a lucas. El Gobierno debería de contratarlos y meterlos en Seguridad Nacional o de perdido en la AFI. Serían muy buenos investigadores, creo que hasta podrían dar con el Chapo”.
Pero después mi otro yo, me dijo: neee..esos no saben ni usar una computadora, todavía escriben en maquinitas de cinta. Y a parte de todo eso, ¿Cómo que andar dejando cartitas casa por casa, eso ya no se usa, ya está out. Lo inn ahora es intimidar mediante cadenas de e-mail y poner una imagen photoshopeada donde aparezca la llorona clamando por tí, o de perdis escribiendo un texto en donde amenaces diciendo que si no le das FW te va a cargar el payaso”
Las instrucciones decían que debía hacer 20 cartitas como esas y dejarlas en igual número de domicilios pero pudo más mi espíritu regio que el temor de no ganarme la lotería (al menos le hubieran cambiado y poner algo mas “chick” y en lugar de la lotería me prometieran ganarme el “súper loto millonario” o el “tris” así a lo mejor me animaba) o sufrir una muerte fulminante y no cumplí lo que me pedía.
Opté por dejar el escrito sobre la tapa del tanque del inodoro, para algo habría de servir. Y pensé para mis adentros al fin y al cabo ¡¡¡¡al fin es viernes!!!! Y nada malo me debe suceder en este bello día a parte de tener que pagar los recibos.
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Caos y Bicente Nario
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Posted:Oct 15, 2010 3:13 pm
Last Updated:Oct 19, 2010 10:27 am 13342 Views
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Iba con un camarada en su “nave”, aunque más que nave parecía carretón, por el ruidoso motor desafinado, una que otra pieza suelta de la carrocería y los amortiguadores sin mantenimiento que se cargaba la trokita, aunque según dice él, era peor andar a pata, pero yo tenía mis dudas. Andábamos matando el tiempo, transitando por las “flamantitas” arterias de mi ciudá. Era plena hora pico, las calles de el centro de la ciudad transformadas en un caos estaban más congestionadas que de costumbre, con los vehículos avanzando a vuelta de rueda. Yo andaba como perrillo de rico, osea haciéndola de copiloto, mirando por la ventanilla del coche y con la lengua de fuera por un inusual y sofocante calor vespertino en pleno otoño. Órales, me dije a mi mismo: ya mi pueblito parece toda una metrópoli, con cuellos de botella y conductores malhumorados que en vez de echarse una persignada, no dejaban pasar la oportunidad de emitir uno que otro recordatorio maternal con el claxon a los que iban adelante, no importándoles que estuvieran frente a la Catedral. Añeñe y luego nos andamos preguntando que por que nos castiga Diosito mandándonos al infierno si ni siquiera cuando pasamos a un lado de su casa nos acordamos de él.
Debido a el lento avance de la interminable fila de automotores, en algunas partes se podía respirar el humo proveniente de los escapes de carros antiguos sin afinación, con esos vapores ya pa’que necesitaba uno cigarros, con hacer una inhalación profunda bastaba para llenarse los pulmones de un poco de cáncer y sin comprar tabacos. La puuuura vida modernista se dejaba sentir a esas horas, eso sin contar el bochorno que hacía más irritante la espera a las personas que, supongo, si tenían algo que hacer, no como nosotros. Todo este desmadrajuste vehícular en el primer cuadro se acrecentaba por algunos trabajos de perforación que se estaban haciendo en algunas calles. Shiales, pensé, como que ya las arterias le están quedando chicas a tanto carro, a lo mejor va a haber necesidad de mandar a hacer de inmediato un segundo piso vehicular como el de la Ciudá de la Esperanza, pa´mejorar la fluidez, pero pos’ si ahorita el municipio no tiene feria ni pa’ un buen bacheo, como que si está canijo andar con sueños guajiros.
Ya pasando el tramo de el “centro histórico” el tráfico se regulariza, y enfilamos hacia la Soriana, allá por donde se construye un puente inter estatal, el cual se va construyendo a paso de tortuga, pensaban terminarlo en septiembre, y que esta obra fuera nuevecita de paquete para su inauguración en el mes patrio, pero ya se va a llegar el día de muertos y nada.
Al ver como está quedando la gran construcción me dice mi camarada: “óoorales, ya Matehuala está pareciendo ciudá”, Yo, como no andaba muy de ánimo para sacar conversación debido al amodorramiento calórico, sólo acierto a decirle, “si, verdad”. Le pregunto….¿y no sabes como le quieren poner al puente?. No, me responde. Pos’ es uno muy original que casi no se ha usado este año, es …“Bicentenario”, le comento.…Shialeeees, me dice, como que ya están aburriendo con esa palabrita, primero empezaron con el torneo de liga de primera división, y le siguieron hasta con deportes amateurs de Matehuas, y quien sabe cuantos concursos más. Ta’ bien que hay que ser patriotas pero no es pa’ tanto. Yo, con mi pose y voz dramática de artista de telenovela de El canal de las Estrellas, con mi mano derecha tocándome el corazón le digo: es que, pos hay que amar a la nación, quererla a pesar de todo. Es más, en dado el caso y aunque lo veo muy ca..ón, y no lo deseo, por la crisis económica, pero si así lo quisiera el destino, me equivocara en la cuenta o debido a una falla en el control de calidad de los Simi gorritos, llegara a ser papá este año, le pondría a mi chilpayate como primer nombre Bicente, aunque la “B” sea falta ortográfica y como segundo Nario, osea Bicente Nario González, para andar a la moda con los festejos de Independencia y Revolución.
Mi compañero no sé si por el apentontamiento producto de las altas temperaturas, o porque estaba pensando detenidamente lo que me iba a responder se queda callado unos momentos. Después de unos segundos me dice: ¿“quemamucho” el sol, verdad, y más de el lado en el que estás, ¿no?; y pues, el hipotético no nacido ¿que culpa tienen de que su futuro papá sea un payaso marca diablo?, está bien si fueran Olimpiadas, y le pusieras Olimpia si fuera niña. Lo bueno que los encargados de el registro civil están autorizados para impedir ese tipo de indejeces como la que según tú, harías, para no marcar de por vida a los pobres escuincles. No, pos si, le respondí, pa’ no entrar en discusiones.
En el auto estéreo estaban dando un segmento publicitario, con mis sentidos algo aletargados, oigo de repente una voz que pregunta “¿y tú, ya lo hiciste?, si ya tienes dieciocho, es tiempo de hacerlo”, “sácala”....mi retorcida mente hace que en automático pare oreja para escuchar de que se trata el anuncio…luego continúa: “tramita tu credencial para votar con fotografía, o si es 03 renuévala, por que ya no te va a servir para trámites el próximo año”..uffff, yo que creía que iban a promover el destrampe sexual entre los jovencitos. Yo, como soy bien mojigato, ya hasta iba a redactar una duro escrito dirigido a los altos mandos de la radiodifusiora exigiendo que quitaran ese anuncio porque atentaba contra la moral y buenas costumbres de la sociedá; pero no, sólo se tratada de un spot bien ideado del IFE para atraer el interés de el radioescucha adolescente, y de paso de el del morboso, como yo comprenderé. Saco mi credencial de la cartera y veo que es 03, observo mi foto, y se me pone ojito Remi al ver mi imagen de hace 18 años, cuando tenía pelo, ilusiones y luz en mi mirada snifff, sniffff, como pasa el tiempo. Ni modo tendré que hacer un espacio en mi webona agenda para ir a renovar, por que si no, luego no podré sacar el pasaporte para el próximo viaje al Infinito y Más Allá que tengo pensado hacer.
Llego a la casa después de una productiva tarde de no hacer nada, sólo andando de “rol” y estar gastando gasolina a lo indejo. Me consuelo con que eso fue “más mejor”que estar echado en el catre rascándose la panza hasta que el sol se metiera pa’ poder salir de mi cueva.
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Gatos y Zancudos
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Posted:Oct 3, 2010 11:36 pm
Last Updated:Oct 18, 2010 12:46 am 13602 Views
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En lo más oscuro de la noche, los zancudos tal pareciera que querían dejarme marcado de por vida. Para ahorrar un poco de energía eléctrica evitaba encender el abanico y no tenía otra manera de ahuyentar a esos diminutos vampirillos más que con un periódico, pero estos bichos que perturbaban mis sueños tenían alma de político conchudo, por que por más periodicazos que les daba, estos no se daban por enterados y seguía en su labor que era la de nadamás estar ingando y chupando recursos vitales que no les pertenecían. Lo bueno para estos pica venas era que mi torrente sanguíneo estaba libre de alcohol, así que no estaban volando en estado de ebriedad por beber mi líquido hemático, y así se evitaban un trágico accidente aéreo. Ya casi estaba acostumbrándome a los portadores de dengue, mi piel poco a poco se volvía insensible a sus picaduras, y estaba por entrar al país de los sueños, cuando de repente, una pareja de gatos, al parecer sobre la azotea de mi guarida empezó a hacer sus “cositas” y como era de esperarse, traían una escandalera, ya hasta creía que en lugar de estar procreando se andaban matando el uno al otro ya que los desgarradores chillidos que emitían eran propios de una película de terror, pero ni modo, querían familia, y para poder tener descendencia, según los muy entendidos de la naturaleza felina, las pobres hembras deben experimentar mucho sufrimiento, pero les gusta; así es la naturaleza de perversa con algunos seres, hasta hace que le encuentres sabor al dolor o malos tratos.
Al poco tiempo de iniciar el concierto gatuno, se unieron a la improvisada serenata el sonido de el agua que desde el día anterior había sido cortada y hasta esa hora empezaba a tener la suficiente presión para subir hacia los tinacos, además de los ladridos de varios perros que trataban de apaciguar en vano desde sus moradas a los amorosos mininos, pero estos estaban duro y dale, privados de la mente, cumpliendo con lo que la madre naturaleza les había ordenado.
En varias ocasiones me dieron ganas de asomarme al techo para ver si podía poner fin a el disturbio de los inmorales felinos aventándoles un zapato, ya que no me dejaban conciliar el sueño, pero luego me dije “neeee….pobrecillos hay que dejarlos que gocen su sufrimiento, por que si se ha de sentir gacho que le corten a uno la inspiración, y como dicen que todo lo que haces en esta vida se paga, no sea que en una de esas el destino me pase la factura por lo que le hiciera a esa parejita de tórtolos y alguien me distraiga cuando esté en plena acción, y sobre todo si por alguna circunstancia, yo que soy tan casto y puro, a base de engaños me vea obligado a regar una parcela que no sea mía y me agarre el dueño de el terreno en plena faena y en lugar de un zapatazo me tire un plomazo….Hay nanita….de sólo pensar que eso podría suceder, se me había encuerado el chino, así que opté por dejar que el par de micifuz siguieran dándole vuelo a la hilacha aunque me viera perjudicado por mi mal dormir.
Algunas horas después, los rayos del sol que entraban a la guarida me obligaron a levantarme. Algo modorro aún, veo tirado a un lado de la cama el periódico que usé como arma defensiva para asesinar los malignos señores alados de la noche que se dieron un banquetazo a costa de mis fluidos. El rotativo estaba lleno de sangre, y no por que tuviera una nota roja al estilo de Alarma del tipo de “matóla, dególlola y destazóla”, si no que literalmente se encontraba manchado de esa sustancia escarlata por haber destripado con él a unos cuantos zancudos, estos habían dejado su huella para la posteridad impregnada en las hojas. Snifff…snifff, me sentí mal por haber masacrado a esos pobres seres que sólo hacían su luchita para sobrevivir en este mundo cruel, pero en fin…así es la vida.
Al recuperarme de la tristeza que me dio por saberme un asesino, tomé el periódico, me fui a mi sala de lectura que también uso como sanitario, y me puse a leer las notas que ahí venían. Una de ellas informaba que el Ayuntamiento de mi amada y querida ciudá de Matehuala estaba pensando pedir un préstamo para poder dar el retroactivo a los empleados que faltan por recibirlo. Después de mensarle un poco me dije….Shialesssss La Presidencia está siguiendo los pasos de la típica empresa ineficiente o a punto de la quiebra, ya que eso de adquirir una deuda para salir de otra deuda si que ta ca..nijo, como que la cosa si ta algo hodida en la tesorería, todavía no pagan el aumento de este año, y el hipotético préstamo que van a pedir, lo planean liquidar en diciembre, que es mes de aguinaldos, y ya pa’ enero del 2011 viene el otro mini aumento…¿pos como le irán a hacer con tanto inche gasto?, y pos, eso tienen que pagarlo, porque según mi estrecho entender eso es gasto “corriente”, ni modo que ahora se hagan que la virgen les habla como con el gasto “corriente” de la pasada administración, y le dejen la deuda del préstamo para “el que viene”. Lo que deberían de hacer es quitar el gasto “fino” que representa el tener regidores con altas “compensaciones”…como que estos un “pequeño” lujo que está canijo seguir sosteniendo, así estaría menos pesada la nómina. Una leve constipación me hizo volver a la realidad…y mi otro yo me dijo…”shiales…ya hasta estás mensando que eres un eructito en economía y ni siquiera te sabes la tabla del 2, mejor concéntrate en lo que estás haciendo para que todo salga bien y déjale eso de las finanzas a los fregones de la Presidencia, y pos pa’ que pensar en arreglar el mundo si éste se va a acabar en el 2012, así que esta es la última administración y es la administración de Hidalgo, así que no hay de que preocuparse”. No me quedó de otra más que darle la razón a mi otro yo para no seguir angustiándome por lo que vendrá.
Para olvidarme de mis soluciones mágicas para arreglar el presupuesto matehualense mejor seguí distrayéndome con la lectura de noticias y comentarios. Una de ellas atrajo mi atención: decía que una de las políticas chafas que la hace de regidora en mi pueblito había propuesto que se obligara a los ex regidores de la pasada administración a devolver el bono de marcha que se llevaron. Como que su planteamiento no tuvo eco entre la mayoría de sus “solidarios” compañeros, que sólo toman decisiones “colegiadas” cuando sienten que estas les van a llenar los bolsillos. Ya que de haber dado el sí, ellos lógicamente deberían empezar por haber devuelto el “anticipo” de 20 mil pesos de bono que se otorgaron antes de querer poner patas pa’ arriba y sarandear un poco para vaciarles los bolsillos a los que ya huyeron con el botín, y como que eso no les simpatizó. Y pos’ no es que sea desconfiado, pero como que esa propuesta me ó más a plato de lengua. Ya que para que alguien exiga algo como lo es la devolución de recursos monetarios, debe empezar ella misma por hacerlo, aunque los demás no lo hagan, todo con el fin de estar a gusto con su conciencia (¿conciencia?, ¿Qué es eso?), y si, según las leyes, no puede regresar la feria a la tesorería, La buena de Isabel, podría optar por entregar ese dinero a una institución de beneficencia y hasta se puede tomar una foto junto a un cheque grandototote con los integrantes de la organización a quien les da la mano, como lo hacen las cadenas comerciales cuando entregan lo recaudado por los redondeos, para tener pruebas de el apoyo otorgado. Y no debería importarle que los demás “compañeros” vieran esto como un movimiento “político o un acto “populista”, el chiste es soltar la lana mal habida. Pero como dijo el salmón: “es muy difícil nadar contra corriente”. Para ya no dejarme de ser consejero de conciencias regidorianas y no amargarme la existencia, mejor le puse más empeño a lo que estaba haciendo para acabar rápido mi labor.
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Aumentos y Concursos
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Posted:Aug 30, 2010 9:33 am
Last Updated:Oct 18, 2010 12:51 am 12452 Views
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Aun faltaban muchos días para celebrar el inicio de la independencia de México en la Plaza Principal y yo ya me estaba adelantando a dar el grito en una tienda de autoservicio por el súbito aumento en el precio de el cartón de huevos que de una semana a otra se fue de 25 pesillos a 35 pesotes y al parecer en días anteriores había llegado a 40. Neeee, me dije, yo que estaba acostumbrado a presumir que era un hombre que tenía muchos productos de gallina ya que siempre había en mi alacena gran cantidad de ese alimiento porque era uno de los productos llenadores de panza más barato que podía conseguir. Ahora tendría que conformarme con adquirir nadamás un cartón de estos, porque después no se vería afectado mi presupuesto para el fin de semana, y si compraba otro, mis recursos económicos ya no serían suficientes pa’ comprar un cartón de otro producto de primera necesidad como lo las bebidas amargosas. Shiaaaales, los sacrificios que uno tiene que hacer para mantenerse bien nutrido e hidratado.
Pa’ acabarla de amolar, los huevos venían en un tamaño miniatura, casi parecían de paloma. Quien sabe a lo mejor el sindicato nacional de gallinas, plumíferas y similares amenazó a los dueños de las granjas avícolas con irse a la huelga si no hacían algo para evitarles el dolor que sufrían cada vez que expulsaban de su cuerpo ese producto blanquecino, y como salía muy caro operar a cada ave para que tuvieran un orificio de salida más grande, se optó por que el producto fuera tamaño infantil, y así se evitaba la tortura de las pobres emplumadas, y ya ni vaselina necesitarían.
Ya el dinero, por más que quería, no daba para más. Ahora en lugar de comprar las sopas instantáneas tipo Maruchan me vi precisado a adquirir unas bolsas de sopas de esas que se preparan a la antigüita. Ni modo tendría que dejar a un lado la güeva y olvidarme de la comida instantánea. Después de un rato de estar meditando en eso de el aumento de precios de la comida, me dije: “a lo mejor esto es una estrategia perfectamente planeada por el gobierno y productores de alimentos para que los mexicanos nos veamos obligados a amarrarnos la tripa y comer menos y así reducir el número de gorditos en la nación, pero neeee, la cruda realidad era que todo esto es con el fin de ingar más al más hodido. Ya no puede uno darse un gustito de carne de vez en cuando y nos están orillando a llevar la dieta T en versión reducida, ya que esta no incluye ni tortas ni tamales sino pura tortilla.
Así es la vida pero lo bueno es que lo fiestero no se nos quita y ya nos estamos preparándonos para festejar los doscientos años de ser “orgullosamente mexicanos”, aunque, la verdad, como que esta temporada no se siente mucho el espíritu nacionalista, con decir que ni siquiera he visto carros adornados con banderitas nacionales como en años anteriores. Como que se está cayendo en una depresión patriótica colectiva producto de el bajo poder adquisitivo, la escases de buenas noticias, muertos por aquí y por allá. Por más campañas publicitarias de “Tú eres México” que hagan, el ánimo de muchos ni con viagra se nos levanta; por lo visto, con palabras no se arregla todo, y mucho menos se arregla un país, estado o municipio hodido. Si alguien me preguntara “¿vas a festejar el 16?”, yo les cuestionaría: ¿cuál 16?, ¿el 16% de IVA que establecieron éste año las mentes brillantes de los diputados?...pos neeeee, ese que lo celebren los políticos que ya tienen más de donde agarrar, y si es el 16 de septiembre, pos re neeeeeeee, por que ni pa’ un caballito de tequila voy a tener pa’ brindar por los héroes que nos dieron patria, y a lo mejor ni pa’ un inche rehilete me va a alcanzar. Snifffffff, snifffffff….como que estaba apoderándose de mi un sentimiento “emo” y la depresión quería hacerme su víctima.
Ya de regreso a la guarida con mis huevos, sopas, tortillas y demás, ojeroso cansado y sin ilusiones…ahhhh y próximamente flaco y no por gusto, si no por la pobre ingesta de alimentos debido a que el aumento de precios me orilló a surtir menos artículos para la despensa, paso por una calle en la cual están haciendo reparaciones de tuberías, y tal parece que el suelo de esta vía lo han confundido con las extremidades inferiores de una chica de la vida alegre por que nadamás lo andan abriendo y cerrando debido a malos arreglos y peores supervisiones. Shialessss, me digo, saldría más barato si a los trabajos de drenaje que se están haciendo en lugar de echarles tierra les pusieran un zipper como el de los pantalones, para abrirlos con más facilidad cuando haya una regazón. En fiiiin, como decimos los chambones: “echando a perder se aprende”, y naiden nace enseñado y se puede aprender sobre la marcha; al cabo la gente aguanta y para no padecer los malos olores producto de los desechos de la digestión humana, con contener la respiración hasta ponerse como Barney basta.. A lo mejor con la experiencia adquirida, en futuros arreglos en otras calles ya no se meterá tanto la pata y el trabajo de introducción de drenaje sería como echarse un rapidín y en un dos por tres “ya ta’ toyo, y a tapar el joyo”
Llego al cantón sofocado por la laaaarga caminata con las bolsas a cuestas. Enciendo la Televisión y me encuentro con la noticia de que una mexicana ha sido coronada Miss Universo. En automático, mi retorcida, malinchista, mezquina y anti patriótica mente piensa que para ahora si para tener algo que festejar en este bicentenario y como no se pudo sobornar a todos los equipos de futbol de el pasado mudial para que el Tri quedara campeón, Felipe Calderón desembolsó unos cuantos dolaritos para que nuestra paisana ganara el concurso. Después de ver a la chica y el como se desenvolvió a lo largo del concurso empiezo a convencerme de que ese título fue muy merecido y sí tenemos algo de que estar orgullosos es de la belleza de las mexicanas, y aunque digan algunas feministas amargadas que en los concursos de Miss Universo tratan a las mujeres como si fueran reses, la mexicana dejó en claro que la belleza e inteligencia no siempre están peleadas. Y pues sinceramente, quien no quisiera echarse al plato el aguayón de una de esas “reses” que se vieron en el concurso, pero ni modo, para conseguir esas carnes si ha de estar canijo, no es mas que la meritita verdá, no ha de bastar con ser cariñoso, y detallista, (ni que fueramos Cuauhtémoc Blanco que enamora a mujeres de muy buen ver sólo con su personalidad) también hay que tener un buen soporte finaciero, por que a veces los “detallitos” muy caros y yo si acaso tengo feria pa’ regalar un globo de helio en forma de corazón cada 14 de febrero.
ijuesuuú, de sólo pensar en los “cortes finos” que habían desfilado en la pasarela de Miss Universo ya hasta se me estaba haciendo agua la boca y pa’ no deshidratarme eché mano del garrafón de agua de 10 pesos aunque fuera de dudosa purificación, por que ya no podía comprar de la de “marca”, y en lugar de tener uno de esos filetazos en mi mesa, me tuve que conformar con unos huevos estrellados y fijoles de la hoya. Ni modo, quien me manda no ser hombre de billetes.
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Despertares y patadas
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Posted:Jun 28, 2010 6:28 am
Last Updated:May 22, 2024 9:41 am 12400 Views
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Eran las nueve de la mañana de el sábado, me encontraba plácidamente babeando la almohada, soñando que tenía a mis costados a Shakira y Beyoncé susurrándome dulces palabras al oido, haciendo que subiera mi temperatura corporal, aunque las únicas que entendía era las que emitían los sensuales labios de “La Loba”, porque no sé inglés y Beyoncé en mis delirios somnolientos no hablaba español; cuando repentinamente un estruendoso ruido hizo que regresara bruscamente al trágico y gris mundo real. En la colonia al parecer alguna persona se había ganado la lotería o estaba festejando anticipadamente el triunfo de la selección, y para que todo mundo se enterara y compartiera su alegría, le subió a todo lo que daba el sonido del auto estéreo, no importando que retumbaran los vidrios del carro, el chiste era poner gorro y andar de escandaloso.
La inspirada y sesuda rolita que emitían las bocinas de el auto era la nueva de los Amos de Nuevo León “No los oigas”…la estrofa de la canción que me despertó decía: “Me gusta tomar escuchar corridos, andar en los bailes con mis amigos, echarme un perico, andar con las viejas ese es mi delirio”…Con la modorres fielmente reflejada en mi inflamada cara, y la frustración de no poder hacer realidad ni en sueños una de mis más anheladas fantasías, resignadamente hago los primeros intentos por despegarme de el catre ya que al parecer la “serenata matutina” iba pa’ largo.
Ya incorporado y tratando de poner a funcionar a la solitaria neurona que está borracha de tanto girar en el inmenso vacío de mi cráneo, me pongo a mensar y me cuestiono: ¿porque a algunos les gustará matar cotorros?, o a que se referirán los “amos” en su melodía con eso de “me gusta echarme un perico”, pos’ sabeeeee…ya después lo averiguaré.. Mientras tanto me dispuse a preparar mi litro de café para eliminar un poco la endejez matutina.. después de un rato de estar planchando nacha sentado en la sala sin hacer nada, con la vista perdida en el interior de la taza de café que tenía un color más negro que mi futuro, caigo en cuenta que eso de “echarse un perico” quería decir polvearse la nariz por dentro, o andar de drogo….neeeee, re contra shiiales, ahora si que me pasé ingenuo, de inocente por no decir de menso, yo que ya iba a demandar a el grupito ante la sociedad protectora de animales por andar asesinando aves en peligro de extinción, en fin, cada quien con sus vicios…y pos sea lo que sea, la musiquita está pegajosa, empieza como balada para después continuar con una parte rítmica, así que mejor ni la critico, por que de seguro una de estas noches que ande de parranda me va a dar por gastar las suelas de mis huarches sacándole lustre a la pista de baile al de esos acordes, porque aunque yo soy de los que gritan “¡Queremos Rock!!”, de vez en cuando no cae mal darse un resbalón y sacudir un poco la polilla moviendo el bote.
El “concierto al aire libre” duró menos de lo que pensaba, nadamás media hora, pero como el sueño ya se me había espantado, y no tenía nada mejor que hacer, me dispuse a ir por un garrafón de agua, ya que mi confianza en la pureza del “agua potable” que sale de la llave de mi guarida se había ido al caño el día en que debido a una fuga en el tinaco, me tocó hacerla de plomero y reparar ese desperfecto para luego no andar chillando por el cuentón que saliera en el recibo por el desperdicio. Al echar un vistazo al recipiente, me asombré de la gran cantidad de desechos y sales minerales que se encontraban asentados en el fondo, y eso que este tenía bien puesta su tapa y hace algunos meses lo había limpiado; también las paredes interiores de los tubos estaban a punto de obstruirse por la gran cantidad de material que tenía incrustado….Shialesssss, me dije, si así están los tubos, como estarán mis riñones por andar tomando directamente de el grifo el vital líquido, y como hombre prevenido vale por dos, ya no me quise arriesgar a sufrir un taponamiento de las vías urinarias. Aunque también ahora salen con que algunas purificadoras venden agua con “heces fecales” (que forma tan elegante de nombrar a la mierd… en fiiin, ya no halla uno que hacer para mantenerse sano, se me hace que voy a optar por consumir exclusivamente líquido amargoso, para evitar los cálculos renales, dicen que la cheve es buena para limpiar los riñones (pretextos para andar en el agua no faltan).
Ahí voy yo con huevón andar y el garrafón vacío de 19 litros rumbo al OXXO, en el camino me encuentro con un par de mujercitas adolescentes muy lindas ellas, algo afresadas con visible muestra de nerviosismo en sus caras. Se encontraban paradas a un lado de una de esas motonetas que casi parecen de juguete y tanto abundan en la ciudá. No la podían encender por más intentos que le hacían, se me hace que ya casi se habían acabado la batería por tanto empeño que le ponían en encender su medio de transporte mediante el botón de arranque, pero todo resultaba inútil. En eso pasa una persona montada en una moto “Islo” , con una carretilla amarrada en su parte trasera de esta y un excelente sentido de equilibrio se detiene frente a las niñas y les pregunta :
-¿Qué le pasa a la moto?
-Eeesss queee, no arranca, le dice una de ellas.
-pos, inténtele con una patada a ver si así, les aconsejó el señor.
Al oir esto me dije: “Shialesss…con violencia no se arregla nada, y menos una moto, como va a encender un aparato agarrándolo a fregazos”.
Las chicas se quedaron con cara de “what”. El buen samaritano al ver que no sabían eso de “la patada”, se bajó del su vehículo y les dijo que la moto contaba con una palanca cerca de el motor que servía para encenderlo cuando no se podía echar a andar con el botón. Una de las féminas posó su delicado pie en ese mecanismo e hizo fuerza sobre él, sin ningún resultado, el hombre, al ver que era más sencillo encenderla él a pasarse un largo rato instruyéndolas en como hacerlo, en menos que transcurre un trienio pudo echar a andar el motor de la frágil maquinta dándole un vigoroso impulso a una palanca mediante su pie que calzaba bota tipo Kenworth….Óooorales, cada día se aprende algo, esa técnica la tendré muy en cuenta para el día que saque en Elektra uno de esos vehículos.
Llego a la tienda donde voy a surtir el agua, aparte de el garrafón, adquiero unos chocolates para endulzarme un poco mi amargosa vida. Al pagar la cajera me pregunta: ¿desea redondear?....Al parecer, aun después de el tiempo transcurrido después de haberme levantado todavía no estaba completamente en mis cinco sentidos porque esa pregunta si que me agarró en curva, ya que por lo antojado que andaba de el dulcecito, lo estaba abriendo en ese instante y mi mente que siempre anda imaginando cosas que no , pensó que la encargada al cuestionarme eso de el “redondeo”, se refería a que si yo quería hacer más voluminoso mi abdomen y por tal motivo no me esperaba ni siquiera a llegar a casa para tragarme la golosina. Ella se quedó un ratito esperando la respuesta. Yo sólo acerté a decir ¿Cómo?...ella me respondió ¿desea redondear 50 centavos?...ahhh…si, le respondí, no dándome cuenta a beneficio de quien iba a ir a parar esa feriecita. Salí de ahí con 19 kilos más de peso en mis manos, y con unos gramos más de cacao, grasa y azúcar en la panza que dentro de poco irían a formar parte de mi llanta abdominal.
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Corajes y Derrotas
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Posted:Jun 28, 2010 6:19 am
Last Updated:May 22, 2024 9:41 am 12470 Views
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“¡Ya no te quiero, te detesto¡, estás toda sucia, arrugada y hueles muy mal; desde que te tengo me has dado más decepciones que alegrías ”, le grité lleno de enojo a La Negra. Tenía demasiado coraje contenido, con gran dificultad me la quité de encima, la arrastré por el suelo mientras la sujetaba de sus mangas para que no escapara de mi al tiempo que le daba unos cuantos puntapiés; la estrujé hasta que los dedos de mis manos perdieron fuerza y terminé arrojándola con gran violencia contra la mesa. Momento después, claramente vi como un líquido rojo comenzaba a escurrir por su cuello, manchando el mantel, cayendo a cuentagotas al suelo. Uno de mis familiares trató de calmarme para que no continuara con mi arrebato de cólera: ¡Shiales, Mau, ya tranquilízate!, sólo es fut bol, no ganas nada con desquitar tus frustraciones con la pobre camisa de visitante de la selección. Neeee, es que no se vale, le dije, yo que siempre me la ponía en cada juego de el Tri y no la lavaba aunque ya estuviera oliendo a perro mojado,y mucho menos le daba su planchadita, ya que era como un amuleto para que el tri siguiera avanzando en el mundial, sniffff, snifff.
¡Uh que la ingada!, me dijo mi carnal: no que tú viajas en silencio y no expresas sentimientos, ahora resulta que hasta crees en la suerte, ya nadamás faltaba que vistieras a los monitos de juguete de playmobil que coleccionas con el uniforme de la selección y prendieras veladoras a la virgen, pero pos, como siempre lo haces, cambias más seguido de creencias que de chones cuando te conviene, ahora agarraste de pretexto a la Selección para no lavar la camisa. Y si de amuletos se trataba, la selección tenía a su conejo completo, no nadamás la patita, no necesitaba de tu colaboración, ni de que anduvieras dizque haciendo “sacrificios”, al soportar los fétidos olores emanados de tu apestosa camisilla pirata de 100 pesos.
¡Ya, ya entendí, me dejé llevar por la pasión de las pelotas!, dije. Neeee, me contesta, ahora por tus desplantes ya derramaste sobre tu camisilla la salsa catsup que quedaba cuando la aventaste al comedor, ya no hay con que aderezar las hamburguesas congeladas que tanto te tardaste en “preparar” por que no sabías que botón de el microondas apachurrar.
Como no tenía con que cubrir mi voluminoso abdomen, me vi precisado a ponerme “la verde”, una camisa de la selección de años anteriores, que me quedaba algo apretadita, por que hace algunos kilos que ya no le la ponía. Jajajajja….órale mano, con esa playera, enseñando panza te pareces al que la hace de conserje en el programa de “Vecinos”, ¿no te da vergüenza ponerte eso?. No me quedaba otra que aceptar sin chistar la acertada observación de mi brother, pero como me daba hueva buscar algo más que ponerme ya que a “la negra” la había dejado pa’l arrastre, y a manera de penitencia, para pagar lo mal que me porté con la pobre garra que no tenía nada de culpa, conserve la vestimenta de personaje de comedia barata de Canal Canal de las Estrellas. Con el sentimiento de culpa a cuestas, salí de la guarida rumbo a la tiendita de la esquina para adquirir una botella de Clemente Jacques. En la colonia parecía que habían dado toque de queda, ya que ni siquiera un perro vi en mi recorrido de la casa a el negocio. La desolación se sentía en los andadores, como si fuera luto nacional, ni siquiera la música reguetonera o grupera que ya estaba acostumbrado a oír se escuchaba. Al pagar, el cajero comenta: ¡chin, perdió la selección!, yo puse cara de no estar enterado de esa noticia. El encargado siguió con su monólogo: Es que los mexicanos le tenemos miedo al triunfo y a esos jugadores les faltó corazón. Por eso perdimos. Yo sólo pude emitir de mi ronco pecho un “Si”, por que traía un gran nudo en la garganta, y no podía articular palabra. Salí inmediatamente de ahí, ya que presentí que si le seguía la plática, el señor me iba a revelar la fórmula secreta de cómo llegar a ser el rey del mundo, y en esos momentos no estaba de humor para discursos de superación personal.
Ya de regreso, un sabroso olor a pollo asado hizo que sintiera ganas de carne blanca, de la que se come. Me aproximo a el carrito en donde se expendía ese alimento y pido uno. Mientras se hacían los preparativos para que me fuera entregado lo pedido, yo me encontraba con la vista perdida en un punto infinito de el cielo buscando la respuesta de el por que nos pasa esto a nosotros los probes mexicanos. Oigo una suave voz que me saca bruscamente de mis sesudos y trascendentes cuestionamientos ¿Partido? . Por un momento pensé que la mujer me estaba preguntando si había visto el partido de México, pero al alzar la vista y observar que tenía en una de sus manos la suculenta ave sujetada por unas pinzas y en la otra unas tijeras, entendí que se refería a si lo quería en pedacitos o entero. Sip y con una cebollita, respondí . Vaya, me digo ya rumbo a mi refugio, al menos la mujer no me comentó nada de el juego, con eso de que ahora hasta las féminas de emocionan con el fut y muchos tenemos la creencia de que si hubieramos estado de técnicos de el Tri, podríamos haber hecho mejor las cosas que El Vasco. Pero se veía que ella estaba en lo suyo, que era trabajar, y no andar con la esperanza de que un triunfo en el fut bol va a hacer que las cosas mejoraran en México por arte de magia de un día para otro volviéndonos bien trabajadores y con mentalidad ganadora para formar parte de los países primer mundistas nomás repitiéndonos que ¡Si se puede!, ¡Si se puede!.
Ya instalado en la guarida, veo como el hielo de los restos de una michelada que me había preparado para “disfrutar” de el juego se diluye lentamente, tal como se fueron disolviendo mis esperanzas de un pase a la siguiente ronda de el “Tri de mi corazón”, conforme pasaban los minutos de el trágico encuentro. …sniffff, snifff…no, no lloro por la derrota, si no por que acabo de abrir la bolsa para echarme el pollito y estoy partiendo la cebolla; las penas con pan menos, y pos no queda de otra, a esperar otros cuatro años, y si es que antes no nos carga el payaso, a ver si pa’ la próxima si se nos hace ser campeones de el mundo, y vamos a celebrar a la plaza principal. La esperanza muere al último.
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Calor y Operativos
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Posted:Jun 16, 2010 7:04 pm
Last Updated:May 22, 2024 9:41 am 12538 Views
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Se estaba pronosticando lluvia y mal tiempo en esta temporada primaveral, pero al parecer San Pedro cambió de planes y se condolió se nosotros dándonos tregua al cerrar por unos días la llave allá en las alturas. El calor de 28 grados que se sentía aún cuando el sol ya comenzaba a perderse tras las montañas, era el pretexto perfecto para que las féminas matehualenses guardaran un poco de su pena en el armario para desempolvar las blusas ombligueras, shorts y faldas arriba de la rodilla para disipar la subida de temperatura corporal y así mantenerse frescas evitando una deshidratación. Es que hay que comprender, los golpes de calor pueden ser de graves consecuencias, y mejor prevenir que lamentar, y a parte de eso, las camelenses regalaban un instante de encanto visual al verlas andar por la calle a nosotros, simples humanillos.
Y pues como aquí en Matehuas habemos puro machote, ni modo que sacáramos ese tipo de ropa veraniega como podría ser una diminuta camisa de tirantes ceñida al cuerpo y short rabón tapando lo estrictamente necesario de nuestra anatomía mostrando la peluda pierna, el ombligo a punto de salir expulsado de la voluminosa panza y demás cosas de las que Madre Naturaleza nos dotó, en peligro y después nos digan que semos unos Rickis Martin cualquiera. Neee, nosotros los hombres debíamos hacer un poco más de esfuerzos para que la temperatura reinante en la atmósfera no hiciera estragos en nuestro organismo, así que no había nada mejor para mantener a un nivel saludable la calidez corpórea que ingerir la amargura de unas bebidas heladas. Shiaaales, justificaciones nunca faltan para agarrar la jarra, pero como dicen, es mejor ser un teporochín conocido que un alcohólico anónimo, neeeee, no hay que ser tan extremistas, nada con exceso, todo con medida, tres medias no le hacen mal a nadie, ¿o si?.
Se apreciaba mucho movimiento tanto de peatones como de automovilistas esa noche, transcurrían los primeros minutos de el domingo. Un cálido vientecillo propagaba el sonido de dos campanadas provenientes de la Catedral avisando que acababan de dar las 12:30, algunos de los céntricos bares se preparaban para cerrar sus puertas a más tardar a la una por que Inspección General dentro de poco comenzaría con sus rondines y los clientes salían buscando donde “seguirla”, así que me uní a un grupito que enfiló sus pasos hacia un establecimiento por la de Hidalgo que tenía permiso para dar servicio después de ese horario.
Tan pronto me introduje en el antro, tomé lugar en la barra. Potentes bocinas emitían la canción de “ese botecito que Dios te dio no es para que se lo coman los humanos”, de los Hijos del Pueblo. De pronto, una damita de buen ver se animó a ser la primera en comenzar a bailar solitariamente contoneándose al compás de la rítmica melodía en una penumbra que le daba un toque más sensual a la figura de la mujer que se encontraba cautivada con el reflejo de su cuerpo en los grandes espejos que cubrían de arriba abajo una pared próxima a la pista de baile. Conforme avanzaban los minutos más personas arribaban al lugar. El murmullo de las conversaciones, la música, el sonido de las botellas chocando por los múltiples brindis, mezclado con los aromas de diversos perfumes, daba como resultado el típico ambiente tabernero.
Todo pintaba para ser una agradable noche sin sobresaltos, pero….
Justamente a la una de la mañana, inesperadamente la música fue acallada, y todas las luces del lugar se encendieron. Shiales, me dije para mis adentros, al parecer ya van a cerrar, tan bien que me la estaba pasando. Pero no era ese el motivo de el súbito cambio de ambiente. De pronto todos los clientes nos vimos rodeados por personas uniformadas, creo que se trataba de un sorpresivo operativo conjunto ya que había personal militar y elementos de otras corporaciones de seguridad.
“Señores, -dijo uno de los elementos del orden-, esta es una revisión”. Seguido de esas palabras, se procedió a separar a las mujeres, llevándoselo personal femenino al área de baños para la exploración y a los de los hombres se nos pidió formar una filita para ser revisados uno por uno en busca de sustancias ilegales o armas. Fue un exhaustivo basculeo, ya que hasta el interior de los sombreros y gorras revisaron, sin olvidar la bolsa chiquita de los pantalones, además del interior de los zapatos, así que mejor ni imaginarse el olorcito que invadió todos los rincones de el local. Como que los ahí presentes no estábamos habituados a ese tipo de minuciosas revisiones, por que cuando tocaba el turno de manoseo y al momento recibir la orden de abrir las piernas y alzar los brazos, tal pareciera que con esto fuéramos a perder nuestra virginidad, ya que sólo separábamos un pie del otro escasos treinta centímetros y como así era difícil explorar las extremidades, los encargados del cateo tuvieron que verse precisados algunas veces a abrirles las piernas más de lo que están acostumbrados a uno que otro pisteador temeroso de perder su sello de garantía. Hijuesú, casi tuvimos que hacer un split como si fuéramos gimnasta olímpico, snif, snif…Que inche exagerado soy, no fue pa’ tanto, de uno que otro esguince no pasó.
Al tocarme el turno, se me ordenó que vaciara todo lo que traía mis bolsillos en la barra, y pos ni modo, a obedecer. Como no queriendo, tuve que sacar los “gorritos de emergencia” que cargo por si se ofrece. El guardián del orden mira el envoltorio y me dice, “órale, ya vienes preparado, verdad”, le contesto: “pos sí, hoy en día está canijo ir a mojarse y no llevar paraguas”. Como que al oficial no le hizo gracia mi comentario, ya que ni una sonrisa se dibujó en su rostro, pero bueno, es un profesional. Al parecer me vio cara de indio bajado de la sierra a empujones, por que me preguntó que si era de aquí, y de que vivía, y ni modo que decirle que de hacerme menso, así que tuve que decirle toda la verdá y sacar credenciales de trabajo pa’ que no dudara de mi honestidá. Ya después del interrogatorio me dijo que me pasara del lado de los que ya estaban checados.
Todo el relajo no duró mas de 20 minutos, y eso que éramos una buena cantidad de adoradores de Baco. Se echaron rápido la chamba.
Después de que se retiraron los azules y verdes, las mujeres que se encontraban ahí corrieron más rápido que inmediatamente a revisar las pertenencias que habían dejado detrás de la barra encargadas al barman. Todo estaba en orden, nada se perdió. Una señorita…mhh…bueno, dejémoslo en… una muchacha, para no entrar en discusiones sobre su vida privada, dijo… ”híjole, hasta a mi bolso azul chiquito me revisaron”, un beodo chistosito de esos que nunca faltan en las cantinas le dijo: “y da gracias de que no te revisaron “el negro” eh. La fémina le lanzó una mirada que se podría interpretar como “que mammmucho el sol y eso que es de noche”. De una albureada no pasó.
Minutos después, todo volvió a la normalidad, y entraron más trasnochadores. Una conocida que había esperado fuera mientras terminaba el operativo me dijo: “nnnombre, yo creía que había pasado algo fuerte, por que había muchas camionetas de soldados, preventivos y estatales afuera y estaba cerrada toda la cuadra”. Neeeee, le dije, sólo fue pa’ prevención, y pos, es mejor eso, por que luego no vayamos a estar como allá en el norte, de una tentada de nachas no pasó, y pa’ que luego nadie anduviera quejándose a Derechos Humanos diciendo que se pasaron de lanzas con los probecitos e inocentes de nosotros, hasta filmaron el procedimiento. Fue algo brusco, pero todo “apegado a derecho” como dicen por ahí y el que nada debe nada teme”. “Shiales”, “pos yo si debo”, me dice la recién llegada con una sombra de misterio que se apoderó de su semblante. Me le quedo mirando con un signo de interrogación reflejado en mis pupilas. Después de una corta pausa y una naciente sonrisa en sus labios me dice: “le debo a la tienda de la esquina, al lechero, a Elektra”… Hijuesú….nomás por que era una mujercita no le di un buen zape, a ver si así se le quitaba lo indigestada que andaba por haber comido payaso. Al parecer, la inspección iba a seguir con el “Lugar de la Gente Bonita”, un lugar de más “chaché” que estaba a unos pasos de ahí. Me dio hueva ir a ver si también fueron para allá, en este lugar estaba bien, y lo que era mejor, aquí estaban más baratas las Helodias.
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Muerte a Medias
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Posted:Jun 16, 2010 6:59 pm
Last Updated:Jun 18, 2010 7:06 pm 13058 Views
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Muerte a medias
Eran altas horas de la madrugada, por la angosta carretera transitaba la camioneta Chevrolet Astro Van. Minutos antes había dejado atrás la peligrosa curva de Santa Teresa, y se enfilaba a toda velocidad hacia su destino que era Matehuala. Los cuatro tripulantes de el “mueble” estábamos más en el universo de el delirio etílico que en el mundo real. De pronto el copiloto, quien era la primera vez que andaba de juerga con nosotros y tenía gustos musicales un poco muy diferentes a los nuestros le dijo a el que iba manejando: “oye, no tienes un cassette con música más calmada por que esa de Bon Jovi y Scorpions, como que no me pasa, hip, hip”. No mamm…tengo puro heavy Metal, nada de cumbia de las que te gustan. El que pedía complacencias se sintió apenado y dirigió su mirada hacia el suelo de la camioneta, entristecido. Mi amigazo del alma, quien se había negado a cumplir los deseos de el cumbiambero, se condolió de él y le dijo: pérame, déjame busco a ver si no anda tirado uno de esos casettes que haya dejado uno de mis familiares, pa’ que no te agüites. Sólo fue un segundo de descuido, desvió la mirada de la carretera, quitó una mano de el volante y eso bastó para que invadiera por escasos 20 centímetros el lado contrario, ocasionando que se estampara contra la esquina de el parachoques de uno de esos autobuses macizos antiguos que daban servicio de Matehuala a Cedral y venía en sentido contrario, ocasionando que la frágil camioneta diera vueltas y quedara en dirección hacia la ciudad de donde proveníamos.
El piloto quedó prensado de una pierna, y yo quien era el que venía en el asiento trasero, me encontraba tirado en el piso de la camioneta, con un entumecimiento en uno de mis brazos, y sin poder abrir los oclayos por que me habían caído gran cantidad de fragmentos de los vidrios de las ventanas que se despedazaron, los cuales ocasionaban un fuerte dolor con solo intentar levantar los párpados. Los otros dos acompañantes habían salido ilesos de el percance.
Minutos de angustia transcurrían, yo en mi trance, sólo alcanzaba a oír a mi amigo que decía a uno de los que se encontraban sin ningún rasguño: “no me dejes morir”, mientras este trataba de zafar su atorada pierna de los retorcidos fierros sin resultado alguno y gritando por ayuda histéricamente Después sentí como una ráfaga de viento helado rodeaba todo mi cuerpo tal era la frialdad de esa brisa que me hizo temblar, como si unas glaciales manos recorrieran toda mi piel, y eso que era Agosto, pleno verano; un zumbido ensordecedor evitó que escuchara más allá de mi agitada respiración…Shialesss….dije para mis adentros, “creo que así se siente cuando a uno lo va a cargar la calaca”, me va a llevar y ni siquiera he conocido el amor, ni tenido un chilpayate, y he sido muy ca…ón con algunas personas que no merecían que las tratara así”...Percibí como de mis maltratados glóbulos oculares escurría una tímida lágrima, en señal de arrepentimiento…súbitamente recuperé el sentido del oído y escuché cuando se pararon otros autos, creo que de trasnochadores que andaban igual que nosotros. Después de eso sentí que unas delicadas manos de mujer me sostenía la cabeza y me decía con una voz entrecortada no sé si por las lágrimas contenidas o la embriaguez interrumpida: “¿quieres saber quien soy?, yo casi inconsciente le respondí: “Si”, pero no puedo verte, no puedo abrir los ojos. No hay problema, después me verás, todo a su tiempo, pero nomás no te me duermas…en eso llegaron los de la Cruz Roja, quienes rápidamente con las “quijadas de la vida” comenzaron a realizar su labor. No tardaron mucho en sacarnos de la masa de fierros sin forma en que se había convertido la camioneta.
Ya arriba de la ambulancia, con la camisa que recién había comprado en la pulga toda rota, le pregunté a el paramédico que qué tenía: “pues parece que nadamás te quebraste el brazo izquierdo” y tienes unas cortadas leves en la cara, shiales, le dije, eso si que es mala suerte, yo que vivo de mi imagen (lo mamilas nunca se me quitó) , después de la indejada que salió de mi boca le cuestioné que por que había sentido ese intenso frío, como si un manto helado envolviera mi ser (bien poético yo, hasta en trágicos momentos eh), tranquilamente me contestó: es que en estos accidentes es común que se te baje la presión y la sangre no circulé correctamente…ahhh, le contesté yo, ¿y quien nos auxilió antes de que ustedes llegaran?...Se me quedó mirando con cara de interrogación, y me respondió..pos, no sé, siempre se paran algunos curiosos a ver que pasó. Y otros nos avisan que hubo un accidente cuando llegan acá, como en esta ocasión. Dejé de andar de preguntón.
Llegamos al Hospital de Campo y poco a poco me fue pegando la cruda y el dolor en el brazo se hacía más intenso, y como no había quien atendiera unas facturitas, tuvieron que mandarnos al hospital central de San Luis, y pa’ acabarla de amolar, se nos prohibió tomar agua por que era el procedimiento a seguir antes de una posible operación. Shiales..esa si era tortura.. Después, ya con la mente fría, pero con el martirio que estaba experimentando en el interior de mi cabeza, como si unos diminutos duendecillos estuvieran agujerando mi poca materia gris con cincel y martillo, me dije, Neeeeee, yo que ya me estaba dejando llevar por creencias de que si es cierto que siente la llegada de la muerte antes de que cargue contigo, de que el de arriba te da una oportunidad de arrepentirte, de que hay ángeles que pueden interceder por ti, echarte una manita y darte otra oportunidad…Neeeee, al parecer todo tiene una explicación científica y lógica, pero por si las dudas, me persigné para mis adentros y di gracias, no sé a quien, por seguir aquí y no estar más allá, Eso fue hace uhhhhh, como 15 años, cuando todavía no había Cds, mp3, ni celulares, y estábamos sintiendo los estragos de la crisis por el “error de diciembre”, ahh…que tiempos aquellos.
Ese día me dije, ya me voy a portar bien, nada de parrandas, ni trasnochadas, pero, es como todo, es difícil hacerse casto y puro de la noche a la mañana, y conforme pasa el tiempo, se curan las heridas, ya sea físicas, o emocionales y se van olvidando las tragedias por las que se pasaron, y sobre todo los buenos propósitos de enmendarse y agarrar el buen camino y llega el momento que hasta te parecen graciosos los problemas en los que estuviste metido, y los cuentas como una gran aventura y a veces hasta los haces ver más grandes de lo que para lucirte y que otros digan “óooorales, este weee, si que la vio cerca, es mi héroe”…..en fin, humanos teníamos que ser, pero bueno, ya que algunos no podemos ser mejores que antes, hay que tratar de ser menos peores, y pues no sé, a lo mejor el ser humano está hecho para portarse bien hasta el día en que se muera, por que probablemente en esta vida se vino a aprender, para después vivir otra vida ya con más experiencia, y ya no cometer las mismas metidas de pata, bueno, bueno, eso lo sabré cuando me muera, ahí luego les cuento cuando regrese del más allá, ya corregido y aumentado, o quien sabe, a lo mejor regreso empeorado y chamuscado depende de donde retorne, si de arriba o de abajo.
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Existencias y Muertes
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Posted:Jun 16, 2010 6:53 pm
Last Updated:May 22, 2024 9:41 am 12371 Views
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Ella clavó su limpia e inocente mirada en mis ojos, como tratando de descifrar el más profundo secreto guardado en el último pedazo de alma que aun me queda y todavía no subasto para ver cuánto ofrece por ella el Chamuco. Sus pupilas reflejaban tanta alegría, y ternura; para rematar, me ofreció la más bella sonrisa que jamás vi, y de pilón, me hizo “ojitos”. Todo eso me estremeció, la verdad no pude sostenerle la mirada, extrañas sensaciones recorrieron mi ser cuando me topé con esas bondadosas expresiones sin malicia, casi podría decir que me causó un incierto temor mezclado con resignación, o quien sabe a lo mejor es lo que se siente cuando estás frente a un ser con alma superior a uno ya que estaba consciente de que yo jamás tuve ni podré tener esa limpieza de espíritu para brindar una expresión de inocencia o felicidad al contemplar a alguien …Hace mucho que no me perdía en esa apacible calma que brinda la mirada de una bebita de un año, pero estos días tuve la oportunidad al recibir la visita de unos familiares y sus retoños.
Dicen que la mirada refleja por lo que has vivido así como tu forma de ser. De ser así, los políticos han de tener marcado el signo de $$$$, en sus oclayos, por que nadamás andan viendo de dónde sacan más feria, haciendo obras de relumbrón que las que dejan más de diezmo. Tal vez por eso los bebés transmiten calma a través de su contemplación, porque su esencia no se ha corrompido. A mi me dicen que tengo la mirada algo pesadita, algunas veces cargada de resentimiento, amargura o de lujuria, frialdad, y no sé que más cosas “bonitas”, el chiste es que tengo una fea mirada, pero en fin, voy a echarle la culpa a las circunstancias, por eso soy como soy, pa’ que me la quiebro queriendo cambiar, al cabo dicen que a pesar de eso no soy tan “mala gente” y mientras no me convierta en un psicópata, todo está bien.
Tan obsesionado estaba con las miradas puras de la infante, que me puse a buscar entre mis antigüedades una foto de cuando era bebé para cerciorarme de que en algún lapso de mi existencia mi alma se encontraba limpia e intacta…pero…oh desilusión: ahí estaba mi imagen plasmada en una hoja de papel fotográfico tamaño carta..algo corroída y amarillenta por el paso de los años, tendría como un año, estaba vestido con unas chambritas color amarillo pollo con gorrito incluido, bien limpiecito yo, pero por más que busque esa inocencia en mis ojos, no aparecía por ningún lado….snifff…snifff… parece que al de Arriba se le había olvidado dotarme de pureza desde el nacimiento…Después de una mini depresión que me invadió en esos momentos, recordé que mi amá me dijo en alguna ocasión que de milagro yo estaba en este mundo, por que el primer día en este mundo, empecé a temblar como si tuviera Parkinson, retorciéndome, al parecer víctima de un gran dolor. Los doitores dijeron que si “eso” no se me pasaba en 24 horas, me iba a ir pal’ más allá sin haber conocido nada del más acá….y pos al parecer si sobreviví ese momento crítico, porque todavía aquí ando, más a fuerzas que de ganas, pero aquí toy. Meditando en eso, me digo: todavía de lástima el Gran God me dio chanza de andar en este mundo y aun me pongo mis moños queriendo que se me otorgara alma limpia y pura como a todos los niños, shiaaales eso si es ser muy exigente..Entonces, creo que mi amargosa y frustrada mirada me acompaña desde el nacimiento por un trauma de cuna…aunque yo ni recuerde haber vivido ese episodio en mi existencia.
Yo soy bien observador, bueno, bien viborón. Una vez le pregunté a un entrañable amigo por qué a cada rato se tocaba la oreja derecha con su mano izquierda… me respondió, “no sé, es un “tic” pero que según mi mamá, eso me había salvado la vida, ya que el día de mi nacimiento, salí con el cordón umbilical alrededor del cuello, pero por fortuna, mi brazo impidió que este se ciñera por completo al pescuezo y me estrangulara”…re contra shialeeeesss…ahora resulta que lo que no recordamos nos hace ser como somos, y también hay eventos que nos marcan aun sin haber nacido y no podemos cambiar, y sólo queda ser como la naturaleza nos formó.
Por mi parte, creo que tendré que conformarme con ver inocencia, pureza y felicidad en otros ojos, por que al ver el reflejo de los míos en el espejo, no encuentro nada de eso, por más que busque detrás de la maraña de lagañas matutinas sólo alcanzo a percibir decadencia, tal pareciera que en mis pupilas están retratados los sexenios de las administraciones panistas de México.
La agradable visita llegó el sábado, y por la noche la bebita se encontraba inquieta, con algunos malestares, su madre en un intento por aliviarla, le da una “barrida” con un huevo y después lo echa en un vaso con agua para ver si le “hicieron ojo”, como yo no creo ni en mi, menos creo en esas cosas, pero no deja de preocuparme el que tal vez, en un remoto caso, podría haberle causado algún mal a la pequeña criatura por haber posado mi vista en sus lindo semblante, robándole así algo de quietud a su ser. La niña tiene una mala noche, ya de día sigue con molestias, sus familiares se dan cuenta que es por algo que le cayó mal en su pancita, y le dan medicina para eso, horas después vuelve a ser la misma que un día antes..uffffff, yo que ya comenzaba a pensar que le había hecho alguna brujería, pero por si las dudas, evito mirarla fijamente a los ojos, no vaya a ser…
Continuando con eso de los ojos y la existencia, recuerdo el último día de mi abuela en este cruel mundo: ella se encontraba postrada en la cama, aferrándose a la vida con las pocas fuerzas que le quedaban a su debilitado organismo, su instinto de supervivencia le ordenaba inhalar la mayor cantidad de aire posible en cada respiración, pero todo el esfuerzo parecía insuficiente para llenar sus cansados pulmones, pareciera que cada vez que abría su boca intentando captar más oxigeno se le escapara un trozo de existencia. Yo estaba de pie a su lado, mientras mi madre preparaba lo necesario para llevarla de urgencia al Seguro Ixtlero donde semanas antes en una de tantas visitas a ese hospital dijeron que ya no tenía caso internarla y el médico había adelantado el trágico desenlace dando la noticia: “ya por la avanzada edad no se puede hacer nada, sólo recomiendo que guarde reposo”. Yo la observaba. Tal pareciera que algún ser imaginario la atacaba, ella trató de protegerse de algo que yo no alcanzaba a ver levantando los brazos, pero fue inútil, en ese instante, su mandíbula ya no pudo cerrarse, quedando desencajada y los enormes ojos cafés perdieron el escaso brillo aun conservaban, este fue reemplazado por una tonalidad mortecina. La mirada quedó clavada en un punto indefinido de el techo: había fallecido. Toqué su cuerpo poco tiempo después, sintiendo como el calor lo abandonaba. Es extraña esa sensación experimentada cuando alguien cercano o conocido se va, y por más que sepamos que para allá vamos todos, siempre nos toma desprevenidos, aunque hagamos el intento por preparemos para esos eventos, siempre nos preguntamos: ¿Cómo puede ser posible, si ayer estaba platicando con esa persona? y lo que es peor, crees que pudiste llevarte mejor con aquel ser que ya partió, o que te faltó demostrarle gratitud y hacer más por él, pero la trágica realidad es que ya no se puede hacer nada, mas que dejar que el tiempo haga su chamba y carcoma poco a poco esos cargos de conciencia que por momentos hacen más pesada nuestra existencia
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